XX (Parte Uno)

- ¿Por dónde comienzo? – pregunta con ansias el maknae al resto de sus compañeros, quienes lo rodeaban expectantes por lo que diría a continuación.

DaeSung: Solo empieza de una vez.

SeungRi: - mirando a Dae – Ellas… tienen cuerpos eróticos – hace un ademan con la mano como si fuese a acariciar los contornos de una guitarra.

G-Dragon: - enojado- ¿Dejaste que se cambiaran en frente tuyo?

SeungRi: No es que se cambiaron, solo alivianaron la ropa que ya tenían puesta.

G-Dragon: Ingrid… ¿Te dijo algo de mí?

SeungRi: Sabia que preguntarías eso. ¿EunPyo? O ¿G-D?

G-Dragon: EunPyo.

SeungRi: – pensativo, intentando recordar con exactitud – Dijo que no eres normal, que tienes mucha azúcar encima y… - piensa un momento – creo que solo eso. También habló de Jung YongHwa.

G-Dragon: - perdiendo el entusiasmo - ¿Y qué te dijo?

SeungRi: Que cuando lo vea, le pedirá un autógrafo. Debiste haber visto su cara cuando hablaba de él. Así que… deberías esforzarte más. – levanta un puño – Fighting!

G-Dragon: – rezonga – No eres quien para decirme lo que tengo que hacer.

SeungRi: Aish. No deberías ser así conmigo, yo hable bien de ti y de SeungHyun hyung.

TOP: – entrecerrando los ojos – Si lo que dices no es cierto, la pagaras.

SeungRi: ¿Por qué no confían en mí? Además – a TOP – Oriana no ha tenido novio – desliza una sonrisa picara – si dejas la histeria de lado, podrías ser el primero.

TOP: No me digas eso que no me interesa… ¿Dijiste que no tuvo novio? – Su compañero asiente con interés – Es obvio… con lo insoportable que es.

SeungRi: Ah! ¡Que lastima! Entonces veo que el vecinito… ¿Cómo se llama? Ah sí, Akihiro-Kun. El será el afortunado en ser el primero en su corazón.

TOP: ¿Te habló del vecino? – el notar que es observado por todos, se encoge de hombros.

SeungRi: Pues… me confesó que le gusta.

G-Dragon: Hyung, no puedes permitirlo.

TOP: – haciéndose el desentendido – ¿Pero qué tengo que ver yo?

DaeSung: Si hyung. Tienes que hacer algo – cambiando de tono - ¿Y por qué dijiste que a ella le gustabas?

TOP: -ruborizado por la pregunta – Por… por un momento lo creí – regañando a Dae - ¿Por qué tienes que decirlo en frente de todos?

SeungRi: – resuelto – Confiesa que te equivocaste.

TaeYang: – se pone de pie – Aish. Parecen niñas de secundaria.

G-Dragón: – lo detiene antes que se marche - ¿Qué piensas de las muchachas, Tae?

TaeYang: Parecen agradables. Pero se irán pronto – mirándolos por encima el hombro – No lo olviden – se retira.

Tres de ellos exceptuando a TOP, comentan al unísono “¡qué cool!”

Nuevamente en el departamento y luego de una jornada laboral, tres de los jóvenes se encuentran a la espera de Or… Ah, no. Esta vez se trataba de Ingrid, ya que ahora en la cafetería trabajaba horario completo, se marchaba bien temprano y regresaba más tarde. Oriana se encontraba cocinando y molestándose silenciosamente por ver a los otros dos muchachos sentados frente al televisor sin ánimos de hacer otra cosa más que quedarse allí, mirando fijamente programa tras programa, como si nunca hubiesen visto televisión.

Oriana: – sin dejar de cortar las verduras, habla a los otros dos muchachos - ¿Qué no tienen algo más interesante que hacer?

SeungHyun: ¿Ya está la comida?

Oriana: No, todavía estoy cortando las verduras.

SeungHyun: Ah. Entonces no. Avisa cuando este lista la cena.

Oriana levanta el cuchillo como si quisiera apuñalarlo desde su lugar.

EunPyo: – a su amigo, envuelto en un leve sentimiento de culpa – ¿No deberíamos ayudarla? Parece que la tratamos como a una empleada.

SeungHyun: Vive gratis ¿qué más querías?

EunPyo: ¿Por qué eres tan cruel? Yo voy a aprender a cocinar para un día sorprenderlas. Y si sigues así, ni siquiera vas a conquistarla.

SeungHyun: - elevando la voz - ¿Qué estás…? – Baja la voz – ella no me interesa.

EunPyo: Comunícaselo a tus actitudes – se abre la puerta principal y sonríe al ver llegar a Ingrid.

La joven hace una entrada triunfal, contenta como nunca la habían visto (ellos dos) y, con algo poco común ¿tenía la cara escrita? Si, así era; la muchacha morocha tenía la cara escrita. Al entrar, por primera vez en mucho tiempo, saluda con buenos ánimos.

EunPyo: - se dirige a la joven recién llegada – Ingrid… ¿Qué te paso en la cara?

Ingrid: ¡YongHwa! – dice con ánimo y junta las manos y las coloca el costado del rostro.

Oriana: ¿YongHwa te firmó la cara? – Pregunta con entusiasmo - ¿Acaso no tenias un papel?

Ingrid: No tenía, pero también me firmó la vincha –le contesta en español, indica sobre su cabeza al accesorio que llevaba puesto – Pero, ya que él fue taaan amable… no sabés lo suavecitas que son sus manos…

Sin notarlo demasiado, pero a la vista de los demás, EunPyo se muestra molesto y vuelve a tomar asiento, acompañado por SeungHyun. Mientras la pelirroja interrogaba a su hermana, éste se acerca a su compañero en el sofá.

SeungHyun: - le dice por lo bajo a EunPyo – Disimula. Esto ocurriría tarde o temprano. Además GD es mejor que Jung YongHwa ¿No?

EunPyo: - como si hubiese descubierto América – Si hyung, tienes razón.

SeungHyun: ¿En qué estás pensando?

EunPyo: En  nada. Me has dado una gran idea.

Oriana: - anuncia – Pronto estará la comida.

La recién llegada se dirige al cuarto para ponerse mas cómoda y la cocinera con una mirada asesina obliga sus amigos coreanos a preparar la mesa. Una vez que se sentaron Ingrid comenzó a narrar la anécdota, con todo el detalle que merecía el caso.

***Flashback:

Después de más de una semana en absoluta tranquilidad y aburrimiento, al fin, como tanto lo esperó y deseo desde que entró a trabajar allí… La puerta principal del local fue abierta por Jung YongHwa, quien de inmediato tomo asiento en la mesa de siempre. Lamentablemente, Ingrid no estaba desocupada, pues de ser así, hubiese ido a atenderlo enseguida. Pero no se privó de pasar cerca de la mesa varias veces, mientras llevaba sus propias órdenes, y poder husmear un poco. Era casi inevitable para ella, aunque procuraba la mayor naturalidad del mundo. Algo así como: "No queda más remedio que ir por aquí". Y eso era algo que Ingrid podía disimular a la perfección. Lo venía haciendo desde hace varias semanas atrás.

En un momento el encargado pide a nuestra protagonista que vaya a hacer unas compras rápidamente, y cuando regreso, YongHwa abandonaba la cafetería por la puerta principal. Fuera de ella, lo esperaban un grupo numeroso de fans, con papeles de colores en sus manos, dispuestas a pedir autógrafos al idols. Él sonrió amablemente y dejó que se acercaran con sus marcadores y bolígrafos.  Esto le tomó un par de minutos, pero las muchachas quedaron muy contentas y se fueron alejando poco a poco, luego de expresarle su admiración. Sin saber bien porque, Ingrid se queda allí parada, mirando cómo se desarrollaban estos acontecimientos, hasta que el cantante queda solo y comienza a marchar en dirección a la joven latina, notando su presencia. Vuelve a sonreír y levanta una mano como si todavía tuviese un bolígrafo.

Ingrid: -para sus adentros- ¿Me está preguntado si quiero un autógrafo? Pero no tengo -tantea su cabeza, tratando de pensar como... hasta que reconoce la suave superficie de la vicha sobre su pelo. -Lotería.

Sin dudarlo, esta era su oportunidad, y no dejaría que se le escabullera por nada del mundo. Corrió hasta adonde estaba el idol, con su flamante marcador para tela. Lo había comprado no hace mucho y estaba en el bolsillo de su abrigo. Dejarlo allí por descuido no pudo ser mejor.

Cuando le entregó el marcador y le explicó que era especialmente para tela, él se mostró conforme y no dudo en hacer un bonito autógrafo para la muchacha.

YongHwa: Listo – le regresa el marcador.

Ingrid: – apresuradamente, antes de que él quiera irse – Oppa… – apunta a su mejilla izquierda – ¿Podrías firmar aquí también? No es por algo en especial, solo…

YongHwa: – agarra nuevamente el marcador – Claro, no hay problema. No es la primera vez que firmo varias veces para alguien. – con su otra mano, sujeta suavemente el mentón de Ingrid, y comienza a firmar su rostro mientras la muchacha se siente levemente admirada de sí misma, por su osadía, y extrañamente alegre por lo que estaba pasando. Era como un sueño. Por fin podía hablar con él, incluso le estaba tocando la cara… Un sueño hecho realidad. Cuando termina, el idol la mira y le regresa por última vez el marcador. – Ahora sí, ya está. A menos que…

Ingrid: No, no – niega con una mano delante de su cara, como si abanicara un mal olor (negación japonesa) – Está bien con esto. Gracias, oppa.

YongHwa: –le presta un poco más de atención – Que ojos más grandes. Son un poco intimidantes. No eres de aquí, ¿cierto?

Ingrid: –un poco apagada por el comentario sobre sus ojos– No, soy extranjera.

YongHwa: Ya veo… –resuelto– Debo irme.

Ingrid: – saluda– Claro, oppa. Gracias por todo. Adiós.

YongHwa saluda con una sonrisa sin mostrar los dientes y se retira de allí. Ingrid lo sigue con los ojos por un instante, sin poder evitar sonreír. Definitivamente era como un sueño hecho realidad. Decidió regresar a la cafetería antes de ser regañada por el encargado.

 ***

Ingrid: –terminando el relato– Y eso fue lo que pasó. Luego seguí en el trabajo y regrese aquí.

Oriana: Bueno. Yo también tengo algo que contarles – todos callan y la miran con interés – Ok. Nos anoté a un programa de concursos.

SeungHyun: ¿Muo? Bichosó? (¿Qué? ¿Estás loca?)

Oriana: Hay una buena ganancia – mirando a Ingrid –Estoy hablando de dinero.

Ingrid: - con interés - ¿De qué se trata el programa?

Oriana: Es un programa de concursos como cualquier otro. Es grabado. Ya mandé nuestras fotos y nos dieron el ok.

EunPyo: ¿pero… de dónde nos sacaste fotos? – mira con preocupación a SeungHyun.

Oriana: Las saqué cuando no se dieron cuenta.

SeungHyun: – visiblemente molesto –¿Cómo te atreves? Ni siquiera nos consultaste.

Ingrid: A mí no me parece tan mal.

Oriana: Estamos hablando de mucho dinero.

EunPyo: Por lo menos nos hubieses consultado, Ori.

SeungHyun: Yo no iré. Me opongo.

Oriana: Si irás, ya estás inscripto.

Ingrid: – con la voz más dulce que tiene disponible – Por favor, oppa. Hazlo por mí.

EunPyo: ¿No hay otra manera de ganar el dinero sin tener que exponerse demasiado?

Oriana: No. He perdido en los diez billetes de lotería que compré hasta ahora.

Ingrid: – casi le salta encima – ¿Qué hiciste qué cosa?

Oriana: - ignorando a su hermana – Como sea, tendremos que ir este domingo por la tarde – antes de que alguien hablara, continúa – Ah! Y la aspiradora que tienen no anda. Deberíamos ir a cambiarla.

EunPyo: - preocupado – Mañana te acompañamos a cambiarla.

Esa noche, a los muchachos les costaba conciliar el sueño, daban vueltas y vueltas de un lado a otro del colchón. El solo hecho de pensar que podrían ser descubiertos en medio de un programa de televisión los estresaba. Mientras el chico de la simpática sonrisa, realizando un constante vaivén sobre la suave superficie en la que estaba recostado, pensaba en cómo hacer para no ser descubiertos, el otro joven, el de lentes cuadrados, no dejaba de pensar en……………………………………………. (Ay, se me atoró la tecla >_<)… en nuestra “simpática” pelirroja. ¿Por qué no podía ella ser como el resto de las jovencitas? Tenía que ser alcohólica (eso es lo que él piensa), buscapleitos, meterse con vándalos, vestirse tan mal, mal educada, tan boba, tan bruta, tan… alegre por cosas estúpidas, tan tierna (si, por momentos), tan solidaria, tan… Y no tenía novio. Nunca tuvo uno… ¿se habrá besado con alguien? – Aish – se despeina, molesto por encontrarse a s{i mismo pensando tantas “tonterías” (guiño, guiño).

EunPyo: ¿Qué te sucede hyung?

SeungHyun: ¿Estabas despierto? Nada… Aish, solo que la babo (boba) de tu amiga nos va a meter en problemas en ese programa.

EunPyo: Yo también pienso lo mismo. Deberíamos consultar con los demás muchachos.

SeungHyun: No. Mejor no les digamos nada.

Al día siguiente, luego de su jornada la pelirroja se dirigió al centro comercial en el que había acordado encontrarse con EunPyo, y lo esperó. Sin embargo tropezó allí con SeungHyun.

Oriana: ¿Y EunPyo?

SeungHyun: No lo sé. Me dijo que venga y luego me llamó para decirme que no vendría y que te esperara. Bueno, de igual manera, hay que cambiar la aspiradora.

Oriana: - extrañada – Mmm Ok. – entra al centro comercial, seguida por el joven de lentes.

Ambos se dirigieron al sector de electrodomésticos, y el inmenso lugar impresionaba a la latina. Pronto le pareció ver un rostro familiar… No, no le pareció, era él. Ahí estaba. Hace tanto no lo veía y ¿Qué hacia un idol en un centro comercial, solo? ¿Y sus fans?

Oriana: - a SeungHyun- Ahí está Hero JaeJoong. Ahora te demostraré que sí lo conozco – se adelanta para llegar hasta el idol.

SeungHyun: - detiene su marcha y piensa – “Nooo. JaeJoong, va a reconocerme”- se escabulle entre las lavadoras y logra desaparecer de ese sector sin que la joven se diera cuenta – “Tengo que hacer algo” – continuaba – “No puedo dejar siquiera que hablen” – sin darse cuenta chocó con alguien, y, al leer la identificación que ésta llevaba abrochada en la camisa, viene a su mente una idea. Por lo bajo - ¿Asistente de vestuario? – Se levantó, se sacó los lentes y con una voz seductora le dijo – Necesito tu ayuda.

Asistente: - como hipnotizada - ¿TOP? Ah. Si ¿en qué puedo ayudarte?

Al momento que esto ocurría, por su lado, la cocinera iba a paso firme en dirección donde se encontraba el idol.

Oriana: - hablando al SeungHyun desaparecido – Ya verás, verás que tengo razón. – se ubica frente a JaeJoong – Annyong – saluda sonrientemente.

JaeJoong: – la mira y reconoce casi de inmediato – ¡Kitty pelirroja! – exclama con alegría.

Oriana: - desorientada – Eeeh… A-no… Oriana.

JaeJoong: Lo siento, no recordaba tu nombre. Eres la muchacha latina que se reconcilio junto con sus amigas de unas chicas europeas, ¿cierto?

Oriana: - asombrada – Si. Soy yo – mira a todos lados - ¡Aigo! Yo quería presentarte a alguien pero no sé dónde se metió. – Cambia el tema- ¿Por qué Kitty?

JaeJoong: Pareces un tierno felino – apoya su mano en la cabeza de la extranjera.

Voz: JaeJoong, tanto tiempo – un tanto alejado de los dos.

Los dos jóvenes dirigen la vista hacia el lugar del cual proviene aquella voz, notando, para sorpresa de ambos, que se trataba nada más ni nada menos que de TOP.

TOP: Acércate – le indica con un ademan.

JaeJoong: Annyong – Lo saluda a lo lejos y con un ademán, lo invita a acercarse. – Quiero presentarte a alguien.

TOP: No. No me interesa.

JaeJoong: - lo mira sorprendido y se acerca a él rápidamente – Estas siendo descortés.

Oriana decide dar media vuelta e irse, se sentía muy incómoda con la presencia de “ese sujeto” al parecer si era como ella lo suponía. De pronto JaeJoong comenzó a dirigirse hacia la joven para impedir que se alejara.

TOP: -al idol, en voz alta – No pierdas el tiempo con ella. A simple vista, se nota que es poca cosa – al instante se arrepintió de lo que había dicho, pero no había vuelta atrás.

El corazón de la muchacha se aceleró y la ira la dominó rápida y completamente. No permitiría que Nadie, absolutamente NADIE la tratara de poca cosa, eso ya no. Dio media vuelta y se dirigió al sublíder de BigBang y con ojos llenos de furia le dijo – Si en los videos que veía ya me caigas mal, en persona me caes mucho peor. ¿Pero sabes qué? Me das pena.

Continuará…

Upps!!! Creo que SeungHyun oppa metió la pata hasta el fondo… y todavía no terminó el episodio. Acompáñennos la próxima semana para ver/leer cómo termina todo esto. Los sorprenderemos!! 
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